Hoy he retomado un trabajo que ayer tuve que abandonar por causa de la lluvia. Se trataba de hacer unas fotos de cisternas de camión, son unos clientes y amigos de Criptana. Mover las cisternas para hacer unas fotos no es moco de pavo, además tienen una terminación de acero inoxidable super brillante, por lo que aconsejé realizarlas en día nublado, pero claro que no llueva y tampoco salga el sol entre nube y nube, en fin, una vez elegido el lugar, un apartado carreterín por el que "supuestamente no pasa ni Dios" (es un camino que une Criptana con Alcázar, camino de los borrachos nocturnos, para eludir a los que te hacen soplar), hay que elegir bien el sitio, colocar, desenganchar la cisterna, etc, etc... ha hecho una tarde de frío y aire, pero lo más curioso ha sido el intensísimo tráfico de camiones, furgonetas, coches, motos, yo flipaba, por lo que la sesión se alargado un montón, entre que unos van y otros vienen he decidido hacerme un autorretrato en la cisterna, ...cuando el diablo no tiene ná que hacer con el rabo mata moscas.
Hace 10 horas
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