Hay ciertas costumbres que se resisten a desaparecer, como el hacer escaparatismo, es decir, decorar un escaparate con determinados artículos, adornos o arreglos para atraer al comprador...
Casa Escudero, antiguo almacén de la Mancha ya cerrado hace algunos años, se resiste a perder el contacto con los viandantes de la Castelar y lo hace a través de la ventana de su escaparate, cíclicamente recrea la actividad festiva o de las labores del campo que en el momento sé este celebrando, como si de un blog virtual se tratara, o al revés, ¿ no es la pantalla del ordenador el gran escaparate del mundo? Me da igual, además, ambos tienen que actualizarse y ofrecer la oportuna información de artículos, precios o lo que sea...
Casa Escudero, antiguo almacén de la Mancha ya cerrado hace algunos años, se resiste a perder el contacto con los viandantes de la Castelar y lo hace a través de la ventana de su escaparate, cíclicamente recrea la actividad festiva o de las labores del campo que en el momento sé este celebrando, como si de un blog virtual se tratara, o al revés, ¿ no es la pantalla del ordenador el gran escaparate del mundo? Me da igual, además, ambos tienen que actualizarse y ofrecer la oportuna información de artículos, precios o lo que sea...
Aún me acuerdo de los abuelos que se exponían en la óptica Perucho, tenían cierta gracia y era parada obligada en el paseo del domingo.
De niño me gustaba parar delante de estos escaparates y admirar sus numerosos juguetes. Aún conservo algunos de los que mis padres me compraron allí. Tengo especial interés por un Palé, que me regalaron cuanto tenía doce o trece años. En aquel tiempo, los escapares de Casa Escudero me parecian enormes. Hoy lo siguen siendo, aunque permanezcan tapados con papeles de colores y solamente esta ventanita, que tan bien has fotografiado, nos va marcando el paso de las diferentes épocas y efemérides del año. Es una lástima que este impresionante Almacén de La Mancha permanezca cerrado, pues su interior era bien bonito. Recuerdo loe enormes frascos de venta de colonia a granel y las numerosos muestrarios de botones. Mi padre trabajó de chico en la tienda. Para todos los alcazareños ausentes esta fotografía es una invitación a la nostalgia y el recuerdo.Por cierto que Casa Escudero fue una de las introductoras de la venta de artículos de fotografía para aficionados en Alcázar, de la mano de KODAK.
ResponderEliminarBASAJAM