ajo

Del ajo son sabidas sus incontables propiedades para la salud, estimulante, diurético, expectorante, desinfectante, antiparasitario, etc. De origen asiático, ya lo cultivaban los egipcios y lo daban a comer a los esclavos que trabajaban en las pirámides, pues pensaban que tenía un gran aporte energético.

En la antigua Grecia se le otorgaban propiedades afrodisíacas y en otras épocas ha sido “útil” para espantar vampiros y por supuesto como condimento en la cocina.

En la Mancha es cultivo muy importante y en la cocina también, dice un amigo mío cocinero que: debe de utilizarse con moderación, si cabe, para perfumar el plato que estemos preparando, sopas de ajo, ajo de patatas, ajo de bacalao, ajoarriero, son sólo algunas de las perlas de nuestra cocina manchega.

He traído aquí esta imagen del ajo, pues un día al abrir una cabeza reparé en sus sugerentes formas y en esas transparentes y finas capas de tela vegetal que cubren y esconden ese picante y prieto bulbo ...y decidí ponerme manos a la obra.

¿Será verdad que es afrodisíaco?